Tener objetivos es importante ya que hace que decidamos donde enfocar nuestras energías y nuestro tiempo para conseguir los mejores resultados.
Todo nuestro organismo reacciona en positivo cuando tenemos una motivación para hacer algo que queremos hacer, que nos interesa hacer y cuando lo empezamos a hacer para comprobar que podemos.
Los objetivos que nos ponemos pueden ser grandes cosas o también pequeñas cosas que nos demos cuenta nos interesan y nos gusta hacer a lo largo de nuestra vida diaria. Yo, por ejemplo, para sentirme satisfecho conmigo mismo he decidido inventar de vez en cuando un plato para comer, original y exquisito o modificar mejorando un plato que ya había hecho.
También escribo sobre cualquier tema que me gusta y que conozco y aprendo escribiendo. También tengo objetivos de carácter más general y que se refieren a realzar mi propia autoestima, mi desarrollo y aprendizaje como persona. Así practico lo más a menudo posible como ejercitar la confianza en mí mismo, como mejorar mi sentido de pertenencia, como mejorar mi auto-concepto como individuo o aceptar mi propia competencia en varios temas. Me doy cuenta y acepto que tengo conocimientos y que estos conocimientos puedo aplicarlos a mi mismo, puedo transmitirlos, puedo mejorarlos y puedo hacerlos realidad en mi vida ya que hacerlo depende de mí en primer lugar.
Objetivos importantes son la búsqueda de la paz interior y la búsqueda de un significado por el que yo estoy en este mundo desde un sentido de espiritualidad que me ayuda a comprender quién soy y cómo soy en los distintos contextos de mi vida.
Otro objetivo es el de crear unas relaciones personales internas y externas con la gente de mi entorno, familiares, amigos, dependientes o superiores. También en ese caso es necesario que yo esté consciente de que las relaciones funcionan cuando yo funciono como persona y cuando yo veo a los demás y a mí mismo como seres que valen, que ayudan, que buscan y que consiguen una apertura suficiente para crear afectividad y satisfacción en nosotros en los demás.
Cada día me pregunto qué es lo que quiero aprender, cómo puedo aprenderlo, cuando y con quien y, con estas preguntas busco las respuestas y las reacciones correspondientes.
Importante es la búsqueda que llevo a cabo en mi día a día de respetar y de que me respeten. Las dos cosas son mutuas ya que para poder respetar, necesito respetarme a mí y ser consciente de lo que significa el respeto mutuo. Busco la forma cómo conseguirlo en los distintos contextos en que me muevo.
Entre mis objetivos un punto importante es el disfrute, este es hacer cosas que me hacen sentir bien dentro de los varios campos en que me muevo con interés preferente, como el aprendizaje, el deporte, el arte escénico, plástico y musical y continuar aprendiendo en estos campos.
Sé y acepto que, como ser humano, tengo la capacidad crítica de motivarme a buscar que es lo que motiva más y en cual tengo más capacidades, referencias y tendencias naturales. Sobre todo, veo y pienso que todas las personas tenemos un sinfín de posibilidades, siempre que seamos conscientes del tiempo del que disponemos y de cómo distribuirlo en nuestro día a día.
Importantísimo o hasta básico es el cuidado de la salud y la preparación física para qué estemos en condiciones de hacer ejercicios y hacer una dieta sana, aplicándola en nuestro día a día con disciplina y satisfacción.
Para facilitar mejor esta satisfacción, por otro lado, necesitamos tener también una capacidad financiera suficiente y hacer planes de cómo crearla y distribuirla en nuestro día a día. El dinero, en el mundo moderno, es un complemento importante y necesitamos hacer planes sobre qué hacer para conseguirlo de forma honesta y suficiente dentro del respeto hacia nosotros mismos y hacia los demás.
El éxito del trabajo y de la carrera es otro elemento sobre el cual se basa la consecución de la capacidad financiera y también de la disponibilidad de tiempo del que podamos disponer para hacerla posible.
También tiene importancia que seamos conscientes de que nuestros objetivos son realmente los objetivos que hemos escogido nosotros mismos y no objetivos fijados para nosotros por otras personas de nuestro entorno y por la sociedad misma en que nos movemos.
