La semana pasada comentaba en este blog los problemas de autoría por los que discurrió la canción del “Buen menú” que cantaban, principalmente, Los Xey y que, según parece, tuvo algún que otro intérprete anterior, entre ellos su verdadero autor, aunque en la actualidad las autoridades hayan decidido calificar como autores, mitad por mitad, tanto a quien la compuso como a quienes la registraron. No es el primer caso, con buena o mala intención, en que un intérprete se adueña de una partitura y la inscribe a su nombre. O que, dado el éxito, el público la considere de ese intérprete en cuestión. O que, directamente alguien proclame y haga constar que una canción es suya sin serlo. Ocurrió con el célebre tema del maestro Padilla “La Violetera” que Charles Chaplin la incluyó en su película “Luces de la ciudad” haciendo constar en los rótulos de crédito que él, además de director e intérprete de la película, era el autor de la música. Padilla, lógicamente, le demandó y la justicia le reconoció como creador del célebre cuplé. Hasta ahí podíamos llegar. O como ocurrió con “El arreglito”, una habanera de Iradier (autor de “La paloma”) que Bizet calcó para convertirla en habanera también, pero de su ópera “Carmen”.
http://www.youtube.com/watch?v=olSyNqNMoT0
Ha ocurrido, ocurre y ocurrirá, sea con uno u otro propósito. O pretender hacerse con los beneficios de otro, o no dar ni golpe ante un papel pautado en blanco porque otro ya lo ha hecho y en muy pocos casos por coincidencia imaginativa.
Hoy nos encontramos con otro de esos casos en que dos músicos afirman ser los autores de un tema de éxito. Ocurrió hace 50 años, con lo que aprovechando la redondez del aniversario, lo utilizamos con excusa para traerlo a la memoria. Al menos fue entonces cuando apareció en público la canción “Cuando calienta el sol” a la que, en este tiempo de frío invernal apetece recurrir. Lo primero, vamos a escucharla.
http://www.youtube.com/watch?v=v-RTbBVts7E
Ahora, una vez escuchada y recordada (en realidad es un tema que desde su aparición no ha dejado de programarse en radio e interpretado por numerosos artistas en solitario o en grupo) vayamos al tema de la autoría. Existe una disputa, que 50 años después no se ha resuelto, sobre si los autores son los Hermanos Rigual que son quienes dieron a conocer la canción y alcanzaron popularidad principalmente con ella, o no son ellos. Parece ser que no fueron ellos los poseedores de la inspiración aunque tuvieran las playas de su Cuba natal ante sus ojos y disfrutaran en ellas del sol. El pueblo nicaragüense se mantiene firme en señalar a Rafael Gastón Pérez como el verdadero autor del tema, aunque con un título algo más largo que el conocido: “Cuando calienta el sol en Masachapa”. Masachapa es una localidad cercana a Managua (60 kms) con playas famosas por su belleza y todo un ambiente de turismo al que sus promotores invitan en base a dejarse contagiar por las suaves brisas que ofrece el Pacífico de Nicaragua”. Esto en cuanto a geografía (los datos están en Internet) y en cuanto al músico Rafael Gastón, recordemos que es autor, entre otros muchos títulos, del tema “Sinceridad” que conocemos a través del cantante de la voz de humo: Lucho Gatica.
http://www.youtube.com/watch?v=ZugRHtjaidI&feature=related
Bien, pues los comentarios apuntan que Rafael Gastón (compositor, además de trompetista y conocedor de otros varios instrumentos) vendió los derechos de autor de “Cuando calienta…” a los Hermanos Rigual y además por una pequeña cantidad. Otras voces niegan esta versión y ven a los tres hermanos, Pedro, Carlos y Mario, como creadores. Como quiera que sea, cierto es que los hermanos Rigual lo fueron, al menos como intérpretes aunque a España llegara antes la versión de un grupo italiano que cantaba en español: Los Marcellos Ferial.
http://www.youtube.com/watch?v=_vb7oVxIsvE
Se hicieron infinidad de versiones, luego os propondré algunos enlaces cuando menos curiosos. Pero ya puestos, hablemos hoy de los Hermanos Rigual.
Básicamente ellos se lo comían y se lo guisaban ya que eran cantantes e instrumentistas. So lugar de nacimiento es Guantánamo, pero decidieron que poco tenían que hacer allí, por lo que se trasladaron a la capital cubana, a La Habana, donde comenzaron su carrera artística. También La Habana se les quedó pequeña y optaron por México lindo y querido donde se instalaron y desde donde se proyectaron. A partir de entonces fueron fijando su residencia en Argentina, en los Estados Unidos, en Canadá y en Italia donde, en esta última, obtuvieron el máximo de su popularidad que les llevó a participar en San Remo. Alcanzaron cierto renombre tanto en Latinoamérica como en Europa, sobre todo en España, pero no fue hasta la aparición del veraniego “Cuando calienta el sol” cuando se consagraron. En vista del éxito decidieron no abandonar el firmamento y su inspiración, una vez alcanzada con el sol, intentaron superarla tomando la luna como destino. Variaciones sobre el mismo tema ya que si en el primer caso es “cuando calienta el sol aquí en la playa, siento tu cuerpo vibrar cerca de mí…”, en el caso selenita se relata que “cuando brilla la luna y estás junto a mí…” También fue un tema muy popular aunque, en la actualidad, no mantenga la misma consistencia que lo del sol y la playa, cosa que a los ojos de la mayoría encierra mayores atractivos, excepción hecha de los lobos.
http://www.youtube.com/watch?v=OjKtk_KyWeI&feature=related
También se endosaron otros cuantos títulos que se dejaron sonar por emisoras de radio y guateques como ocurrió, entre otros con “La del vestido rojo”, un rítmico y acentuado chachachá con el que, al escucharlo, los pies se escapan del cuerpo y adquieren vida propia.
http://www.youtube.com/watch?v=xOTUjJ8dCe0
Muchos títulos tropicales de música sabrosona incluyeron los Rigual en su repertorio: “María Isabel, “Moliendo café”, “Corazón de Melón” que tanta popularidad proporcionó a las morenas Beatriz, Beba, Petra, Carmen y Juanita o lo que viene a ser lo mismo las Hermanas Benítez, y otros temas estandarizados como “Piel Canela”, “Te quiero dijiste” “Vereda tropical” o “Frenesí” con tu tuaaa incluido similar a la exhibición de viento que hacía Ray Conniff en su versión.
http://www.youtube.com/watch?v=FUoBHXBNBPQ&feature=related
además de versionar otros éxitos del momento como ocurrió con el supervendido y superescuhado (hasta aburrir) éxito de The Tokens “El león duerme esta noche”. En la mayoría de las canciones ocurre que la parte literaria, la letra, no suele ser un prodigio poético, pero en este caso, bien sea responsabilidad del traductor o del adaptador, no es como para presumir de ser el autor. Hay estudiantes de 10 años que consiguen mejores resultados cuando se les encarga improvisar una poesía en clase. Pero bueno, ahí está el león durmiendo, que, al fin y al cabo, no deja de ser una versión básicamente musical en boca de un grupo cuya única intención era rentabilizar el éxito internacional.
http://www.youtube.com/watch?v=W3cyDGy1zMI&feature=related
En una televisión incipiente los Hermanos Rigual se hicieron habituales por lo que el público no sólo conoció sus voces sino que reconoció sus caras, algo que casi por sistema acaba siendo reclamado por la gran pantalla. El cine mexicano les ofreció otra oportunidad interpretativa al margen de la vocal e hicieron alguna que otra película: “Cucurrucucú paloma” y “Despedida de casada”, un título premonitor para los tiempos que corren.
Los Hermanos Rigual, autores o no de “Cuando calienta el sol”, dada a conocer hace ahora 50 años, lograron el reconocimiento a sus interpretaciones y el más famoso de sus títulos mantiene plenamente su vigencia, por lo menos de escucha ya que de ventas discográficas no se habla en la actualidad. De entonces a acá se han grabado infinidad de versiones tanto vocales como orquestales. Sería interminable citar todas ellas, además de que siempre la lista sería incompleta, y mucho menos invitar a su escucha, pero podemos hacerlo con una dado lo curioso de su intérprete habitual a cantar en inglés, sobre todo cuando el apellido es Sinatra, pero la hija de Frank, Nancy, que en esta ocasión se ha despojado de las botas para caminar ya que, con ellas, por lo playa se anda con dificultad.
